MONTEVIDEO.- El presidente uruguayo, José "Pepe" Mujica, consideró ayer que la presencia del príncipe británico Guillermo en las islas Malvinas es un gesto "para nada simpático" y exhortó a que el diferendo con Argentina "no tome un tono militar" porque le hace mal a toda la región.
"Desde nuestro punto de vista no tiene nada de simpático", dijo Mujica al diario "La República", al ser consultado sobre la presencia del príncipe en las islas desde principios de mes, en un despliegue que irritó a las autoridades argentinas.
Guillermo, hijo mayor del heredero de la corona británica, el príncipe Carlos de Gales, y piloto de helicópteros, fue enviado a las islas del Atlántico Sur como parte de un ejercicio de rutina de la RAF (Royal Air Force, la fuerza aérea británica). En las últimas semanas Argentina ha denunciado un aumento de la militarización en el Atlántico Sur por parte de Gran Bretaña.
El presidente uruguayo destacó que Uruguay respalda el reclamo argentino de soberanía y resaltó que "el único camino es la negociación" para llegar a una solución sobre el diferendo. "Uruguay históricamente en este reclamo apoya a la Argentina, pero tiene bien claro que el único camino es la negociación y en todo caso la discusión en ámbitos internacionales, y por ese camino es por el cual hay que transitar", afirmó. Confió en que "esta contradicción" entre los dos países "no tome un tono militar ni nada por el estilo porque nos hace mal a todos en la región".
Uruguay resolvió en diciembre impedir el ingreso a sus puertos de buques con bandera de las islas como una medida de solidaridad con Buenos Aires y en cumplimiento de una resolución de la Unasur.
Argentina y Gran Bretaña libraron una guerra por las Malvinas en 1982; concluyó 74 días después con 255 británicos y 649 argentinos muertos en combate y la rendición Argentina. (NA)